Ya ha pasado un año, el año piloto, y ahora sí que os podemos contar cómo ha sido el inicio del Proyecto Jam-Tan, en Dioulacolon (Senegal). 

Como ya sabéis, el Proyecto Jam-Tan está compuesto por el Programa de Protección, que se lleva a cabo durante todo el curso, y por las colonias de verano, que tienen lugar en Agosto.

El verano pasado realizamos las primeras colonias para dar inicio al proyecto, durante el curso se ha puesto en marcha el Programa de Protección que aporta seguimiento escolar y acompañamiento emocional a los niños que más lo necesitan de todo el municipio de Dioulacolon, y este verano hemos hecho de nuevo las colonias que cierran la primera etapa y dan comienzo a la siguiente.

Como en todo proyecto hemos cometido distintos errores, y también unos cuantos aciertos. Así que a continuación os iremos contando qué objetivos de los que se marca el proyecto hemos logrado y cuales no, el porqué, y la planificación para hacerlo mejor este curso que viene. 

El Proyecto Jam-Tan tiene unos objetivos concretos para con los adultos y otros para con los jóvenes. 

Los y las jóvenes son el núcleo de nuestro proyecto. Si nosotros centramos nuestra atención en formar, guiar y acompañar a los jóvenes para que ellos a su vez hagan los mismo con los niños y niñas, los niños y niñas de la zona estarán siempre atendidos, porque los jóvenes de su entorno se encargarán de ello. Así pues, nuestro objetivo principal es siempre dar oportunidades a los jóvenes de la zona que se encuentren en situación de riesgo y que, así, el proyecto pueda ser una oportunidad para ellos, una puerta abierta a nuevos caminos.

Es por este motivo que uno de los objetivos es implicar a los jóvenes en el seguimiento personal y académico de los niños y niñas acogidos por el proyecto, del mismo modo que están implicados en las colonias como monitores. Pero durante este primer periodo, El Staff, el grupo de adultos que coordinan el proyecto, han querido encargarse de dicho seguimiento para asegurar que el proyecto tuviera un buen inicio que permitiera su continuidad. Por esta razón, este año no hemos tenido jóvenes cómo tutores de los niños sino que han sido todo adultos profesionales.  

Gracias a ello, el Staff ha podido conocer las necesidades estructurales que el proyecto necesita y qué recursos se deben abastecer para que todo funcione. Y ahora que ya conocen la estructura que se debe desplegar para el proyecto, han propuesto cinco chicos y chicas (cuatro de ellos han sido monitores en las colonias de este verano) en situación de riesgo (uno de cada sector) para que el curso que viene sean los tutores de los beneficiarios del Programa de Protección. Y ellos serán los supervisores de dichos chicos, los guiarán y los acompañarán en su proceso.

Del mismo modo ha sucedido en las Colonias. El verano pasado fueron las primeras colonias, y daban inicio al proyecto, así que siete de los ocho miembros del Staff quisieron participar como monitores para ver cómo se trabajaba, qué necesidades surgían y para asegurarse que las colonias tuvieran éxito y, así, asegurar el futuro del proyecto. Éste verano, cuatro de ellos se han retirado para dar paso a cuatro jóvenes (los mismos cuatro que formarán parte del Programa de Protección) y colaborar en la parte organizativa. Mientras que los otros tres se han mantenido para guiar y ofrecer apoyo en las actividades. 

En cuanto a la titulación oficial de monitor/a de tiempo libre, no era un objetivo marcado para este año, ya que primero estamos consolidando la estructura del proyecto y conociendo a los jóvenes de la zona y de otras regiones.

Algo que sí hemos hecho y que no estaba marcado como objetivo pero que vemos que tiene muy buen resultado y de entrada seguiremos trabajando para que tenga continuidad, es la formación del grupo de monitores y monitoras de las colonias con chicos y chicas de distintas regiones. Ya el año pasado llevamos monitores y monitoras que eran de otras regiones de Senegal, y éste año, al aumentar el número de monitores, hemos acogido más jóvenes tanto del propio Dioulacolon como de otras regiones. De éste modo ofrecemos la posibilidad que chicos y chicas con formas distintas de trabajar se conozcan y se conviertan casi en una familia, abriendo puertas a que en un futuro puedan surgir proyectos nuevos entre ellos, uniones y relaciones que los favorezca y les de oportunidades. 

Finalmente, contaros que, de nuevo, este año hemos contado con tres monitores titulados, una chica y dos chicos, uno de los cuales ya estuvo el año pasado, que se han encargado de coordinar las colonias y de formar al resto en la realización de actividades. Del mismo modo que hemos tenido entre nosotros a maestros que pudieran compartir con nosotros su modo de trabajar y pudieran llevarse algo de nuestra manera de hacer. 

En cuanto a los niños y niñas, el Programa de Protección ha ofrecido seguimiento escolar y personal a 29 niños y niñas de los cinco sectores del Municipio de Dioulacolon, los 29 que se encuentran en situaciones más desfavorecidas. El proyecto se marcó como condición para este año que entra no ampliar el número de beneficiarios e invertir los esfuerzos en dar solidez a la estructura que permite atenderlos. Aun así, en la reunión de evaluación se acabó acordando que se aceptaría a una niña con discapacidad. De modo que para este curso que viene serán 30 niños y niñas que se beneficien del Programa. 

Por tanto, los objetivos fueron marcados para atender a dichos 29 niños y niñas. 

En cuanto a la escolarización, la hemos garantizado a 27 de los beneficiarios. Los dos restantes son niños con discapacidades físicas que no pueden desplazarse y no tienen medio de transporte para hacerlo, y eso no les ha permitido asistir a la escuela este curso pasado. Este verano hemos podido llevar dos sillas de ruedas que nos habían donado, una para cada uno. 

Si hablamos del suministro de material escolar, el presupuesto que se hizo para financiarlo no fue correcto y el material que se les dio a los niños y niñas no ha sido suficiente para que acabaran el curso. Así que para este año se revisarán bien los requerimientos de cada escuela y se intentará hacer el presupuesto correctamente. 

El seguimiento escolar y el acompañamiento y apoyo se ha llevado a cabo con éxito. A mediados de curso el Staff se dio cuenta que era necesario crear unas tablas en las que apuntar el estado de los niños y sus familias cada vez que hacían una visita, y así los problemas detectados quedarían registrados y podrían llegar a nosotros para que fuéramos financiando aquello que fuera necesario para poner solución a los problemas detectados en el caso de que dicha solución esté en nuestras manos. El problema ha sido que las tablas nos han llegado demasiado tarde y. por tanto, algunos de los problemas no se pudieron solucionar cuando se debía. Para que no nos vuelva a suceder,  hemos establecido una vía clara de comunicación que nos permita recibir la información más rápidamente y así poder actuar en el momento adecuado. 

Y hemos establecido también la estructura que permita dar solución a los problemas detectados, como por ejemplo contactar con vendedores de los pueblos que preparen desayuno para aquellos niños que no se lo pueden permitir, o la inscripción de todos los niños del programa a el Programa de Salud del país que financia la sanidad de aquellos niños en situación de riesgo. Estructura realmente necesaria ya que este año se detectaban los problemas (mayoritariamente alimentarios, sanitarios o de transporte) pero no se aportaban las soluciones. 

Finalmente lo que sí se ha realizado al completo han sido las inscripciones en el Registro Civil de aquellos niños que no habían sido declarados, que según el censo que se logró hacer el año pasado, eran 98 niños y niñas. Actualmente todos ellos declarados. 

Y ya para acabar, explicar que las Colonias de este año han vuelto a ser un verdadero éxito. Hemos aumentado el número de niños a 160, y hemos acogido a niños y monitores con discapacidades, además de acoger a los niños que forman parte del Programa de Protección. También hemos aumentado el número de monitores, hemos alargado un día más las colonias y hemos hecho dos salidas a los pueblos vecinos para que pudieran vivir la alegría de las colonias. ¡Ha sido un verano de verdadero amor, alegría y felicidad!

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